Miedo y estrés: inquilinos que hay que controlar ¿amigos o enemigos?

Estamos en una situación sanitaria extraordinaria a nivel global que estamos afrontando y que tiene y tendrá consecuencias psicológicas, sociales y económicas de gran calado. Las personas que tienen a su cargo criaturas merecen una especial atención porque son los guardianes del mismísimo futuro de la vida. Unas reflexiones para que se cuiden requiere revisitar a dos viejos conocidos compañeros de viaje: el miedo y el estrés.

Sentir miedo es uno de esos equipamientos de serie que traemos con nosotros a la vida. Ayuda a sobrevivir porque nos mueve a ser cautos, por ejemplo. El miedo se convierte en nuestro enemigo cuando le hacemos compañero y consejero permanente. El miedo siempre aspira a quedarse y hacerse el señor de nuestras vidas, por eso cuando lo sentimos tenemos que estar muy alerta para que no se crezca e invada situaciones y cosas que no son de su incumbencia. Esto es, para las que el miedo no es útil sino un ‘quitavida’.

La vida es un continuo movimiento que conlleva numerosas demandas y presiones, a los que hemos de responder. Estas situaciones que con frecuencia implican cambios pueden suponer retos importantes para nuestros recursos y obligan a hacer esfuerzos. Decimos que sentimos estrés: todo nuestro cuerpo y nuestra mente se moviliza para responder. Esto, en sí, es una oportunidad y forma parte de la dinámica vital. Sin embargo, el estrés puede ser tóxico y lo que lo hace tóxico es nuestro manejo. Si damos poder al estrés y se instala como modo de estar en la vida, a medio y largo plazo nos aniquila, llevándose por el camino la alegría de vivir.    

El miedo y el estrés nos sirven si los controlamos, nos destruyen si les damos espacio, tiempo y poder sobre nuestras vidas. Tenemos que ser los dueños de nosotros mismos. Por tanto, si no sabemos controlar a estos compañeros de viaje habrá que aprender, conociéndolos bien y conociendo cómo funcionan.

La sensación de miedo hay que buscar la fuente para ver si es real o imaginaria, desenmascarar todos los ‘Y si…’ que gobiernan nuestra conducta. Ajustar los miedos a lo que realmente sea amenazante solo para tomar la precaución necesaria. Es solo eso, una alerta para protegernos, una vez que la acción se lleva a cabo, la alerta pierde su función y debe desvanecerse.  Si no lo hace es porque la alimentamos con más pensamientos negativos, a menudo catastrofistas. Igualmente el sobreesfuerzo que hacemos para responder a una estresor tiene que ser puntual, no podemos permitir que se instale.

Hay que aprender a parar esa filtración que acaba inundándolo todo. Una estrategia que está tan a nuestro alcance que ignoramos con frecuencia es respirar controlando la entrada y salida del aire. Cuando hacemos eso y nos centramos en la respiración podemos reducir la presión sanguínea y la tasa cardiaca realmente estamos apropiándonos de nosotros mismos interrumpiendo los bucles en los que nos metemos mentalmente pero que están afectando a nuestra fisiología y nuestro cuerpo. Actividades físicas, que tengan que ver con mover el cuerpo también favorecen ese control. Caminar a buen ritmo sintiendo nuestro peso sobre el suelo. La música tanto escuchar como cantar, y si se combina con el baile es aún más efectiva. En general, actividades que nos ayuden a conectar con nosotros siguiendo nuestras preferencias, pero recordando que modos pasivos como videojuegos, navegar por internet, ver TV no son idóneas porque acaban aumentando el malestar. Estas actividades de conexión con nosotros a algunos puede ayudarles hacerlas en compañía. Si no somos capaces por nosotros mismos o con la ayuda de los amigos y familiares de recuperar las riendas, siempre podemos pedir ayuda especializada para aprender a controlar a estos compañeros de viaje, manteniéndolos a raya, como ayudantes, para disfrutar así del bienestar emocional que caracteriza una buena calidad de vida, más necesaria cuando hay que afrontar las dificultades y no sucumbir a ellas.

(24.04.20) M. Ángeles Cerezo ©

Share Now

PILAR CIFUENTES

More Posts By PILAR CIFUENTES

Related Post